1 ¼ taza de agua tibia
2 cucharadas de aceite
2 cucharadas de azúcar
2 cucharaditas de sal
2 cucharadas de leche en polvo
4 tazas de harina de trigo blanca
10 gramos de levadura en polvo
En una bandeja honda, colocar los ingredientes secos. Mezclar bien, hacer un volcán y en el centro colocar el agua tibia y el aceite. Con una cuchara empezar a incorporar y poco a poco armar la bola de masa.
En la misma bandeja, amasar por unos 10 minutos. Dejar descansar la masa por lo menos 35 minutos en una bolsa de plástico. Ponchar, volver a amasar y dividir la bola en dos o en cuatro, dependiendo del tamaño de la pizza.
Extender sobre una superficie enharinada. Pasar a un molde previamente engrasado y salpicado de sémola de trigo o harina de maíz.
Vestimos la pizza con los sabores o "toppings" de nuestra preferencia: Salsa de jitomate, jamón, queso, champiñones, (piña en la hawaiana), pepperoni, queso mozzarella, gouda, parmesano, cebollín, pimiento morrón... lo que gustes.
Sazonar con albahaca, orégano, sal, pimienta, paprika al gusto.
Horneamos en un horno a la máxima temperatura posible, aproximadamente por 25 minutos. Cuando vemos que los bordes de la pizza están dorados, la masa se ha despegado del molde, y el queso se ha fundido y dorado agradablemente, la sacamos del horno y esperamos unos minutos para rebanar y atacar.
¡Buen provecho!
Notas:
* Estas cantidades son suficientes para dos pizzas grandes o cuatro medianas.
** Podemos hacer pizzas verdes, usando "pesto" en lugar de la tradicional salsa de tomate, o pizzas blancas, haciendo una buena salsa de queso.
*** Esta masa se conserva muy bien en el refrigerador durante una semana. Podemos ir sacando "bolitas" de 400 gramos y hornear pizzitas cuando las necesitemos.
***También podemos considerar a esta receta básica como a una "masa universal". Ello significa que si le damos la forma de un bollito y lo dejamos "levar" hasta que duplique su tamaño, lo barnizamos con huevo o leche y lo horneamos, tendremos un panecito muy agradable. A esta "masa universal", por ejemplo, si la extendemos, esparcimos algún tipo de semilla, verdura o especie, la enrollamos y damos la forma del bollo, nos da también para muchas variedades de pan.
*** Esta masa se conserva muy bien en el refrigerador durante una semana. Podemos ir sacando "bolitas" de 400 gramos y hornear pizzitas cuando las necesitemos.
***También podemos considerar a esta receta básica como a una "masa universal". Ello significa que si le damos la forma de un bollito y lo dejamos "levar" hasta que duplique su tamaño, lo barnizamos con huevo o leche y lo horneamos, tendremos un panecito muy agradable. A esta "masa universal", por ejemplo, si la extendemos, esparcimos algún tipo de semilla, verdura o especie, la enrollamos y damos la forma del bollo, nos da también para muchas variedades de pan.